El principio Coriolis mide directamente el caudal másico a través de la deformación inducida en un tubo oscilante por efecto del flujo. Cuando el fluido circula, genera una fuerza de Coriolis proporcional a su masa, que es detectada por sensores. Este efecto permite también determinar densidad y temperatura del fluido.
Al no depender de la conductividad, viscosidad ni del perfil de flujo, ofrece gran precisión incluso en condiciones variables. No tiene partes móviles, lo que reduce el mantenimiento y mejora la confiabilidad.
Principales aplicaciones
Industrias químicas y otras industrias de procesos: Medición de grandes volúmenes de productos químicos crudos, medición de concentración y densidad, carga a granel de diversos productos químicos.
Industria del petróleo y el gas: Aplicaciones en patines de medición, carga a granel, transferencia de tuberías, Medición de densidad de «bypass», gas natural licuado (GNL), Medición de densidad en línea
Industria de alimentos y bebidas: Medición de grandes volúmenes de jarabes, melazas y leche.